ASÍ
VI BERLÍN.
Berlín es una ciudad
muy grande (cerca de 900 km.); en cuanto a su extensión es, tal vez, la capital
más grande de Europa. Por la intensa humedad de su clima y terreno (solía ser
un pantano) es muy verde, rodeada de cientos de árboles. Me impresionaron particularmente como características notorias de esta capital,
aparte de sus amplísimas avenidas
rodeadas de verdor, los marcados y
constantes recordatorios, en diversos
puntos de la ciudad, de su historia reciente; esa página negra que no quieren
repetir: acá un museo callejero, allí una placa, más allá un graffiti con una
reflexión, una marca donde hubo un muro; es
como si en cada rincón colocaran una alerta contra la tentación del
totalitarismo, un “mea culpa” por lo sucedido,
una advertencia, un amargo freno a las nuevas generaciones. Si ha de ser por Berlín, no habrá olvido.
Distingo en Berlín por lo menos 4 focos centrales de
atención:
1.- ALEXANDER PLATZ:
nuestro hotel estaba enclavado justo en
Alexander Platz, uno de los puntos neurálgicos de Berlín. Aquí se puede apreciar el reloj mundial, la
Fuente de la Amistad entre las Naciones, una zona comercial muy moderna, surtida y muy interesante en materia
de precios, comparados con los del resto de Europa (este comentario es
especialmente dedicado a mis colegas,
los compradores compulsivos).
Caminando desde Alexander Platz, se llega a la imponente Torre de TV, que como se sabe,
tiene una terraza de observación, sin embargo, no subimos. Simplemente tomar el ascensor cuesta cerca de
20 euros. Luego, un piso más arriba está
un restaurante giratorio pero también los costos son prohibitivos y, según comentarios
de gente que si subió, la comida no es buena así como tampoco la atención. La terraza de observación del Reichstag es
gratuita y ofrece más o menos las mismas vistas.
Reloj Mundial |
Torre de TV |
También a una distancia fácilmente
caminable, se encuentran la Marienkirche o Iglesia de María. Muy sencilla, de culto protestante. Luego, un poco más lejos, en ese mismo
sentido, se encuentra el conjunto arquitectónico
denominado LA ISLA DE LOS MUSEOS y más allá la Catedral de Berlín. La Isla de los Museos es un conjunto hermoso y, obviamente, los museos están llenos de
tesoros de la pintura, la escultura y en
general, el arte tanto antiguo como moderno.
La Catedral es una obra arquitectónica soberbia y su altar parece (o es) de oro.
En la Isla de los Museos. |
En la Isla de los Museos. |
2. Otra Zona de
gran interés es la AVENIDA UNTER DEN
LINDEN (Bajo los tilos). Esta
Avenida, amplia como todas las avenidas berlinesas, era el sitio por donde
desfilaban la tropas Nazis y para ello casi acabaron con los tilos; luego, quedó
casi completamente destruida en la Batalla de Berlín; actualmente vuelve a ser
un bulevar de gran movimiento y los tilos que la bordean fueron sembrados en
1950. La Av. Unter den Linden Se
extiende por cerca de 1Km y medio; conecta la Bebelplatz, donde sucedió la
quema de libros; el Parque donde se encuentran las estatuas de Marx y Engels; La
Universidad Humboldt y remata en la
Puerta de Brandemburgo.
Inmediatamente, detrás de la Puerta de
Brandemburgo, hermoso arco emblema de la ciudad, se encuentra el famoso Hotel Adlon, lujosísimo
5 estrellas, desde cuyas ventanas
Michael Jackson sacó a su hijo guindando, para horror del mundo. También detrás de la Puerta de Brandemburgo,
una cuadra y media más allá, está el Memorial al Holocausto, más de dos mil
bloques de hormigón, de variadas alturas; este monumento me causó una sensación
de confusión, desolación, como si estuviera circulando perdida entre un montón
de féretros. No, no fue nada agradable e imagino que era eso, exactamente, lo
que se pretendía.
Memorial al Holocausto |
A unos dos km. de allí, se encuentra
CHECKPOINT CHARLIE. Checkpoint Charlie es el más famoso de los pasos
fronterizos que hubo en el Muro de Berlín durante la Guerra Fría, su fama se
debe, tal vez, a que es el único que se encuentra en el centro de la ciudad,
conocido como Mitte. El nombre viene del
alfabeto utilizado por la OTAN: Checkpoint Alfa, Checkpoint Bravo, Checkpoint
CHARLIE, Checkpoint Delta. Detrás del
Checkpoint Charlie está el Museo del Muro.
Checkpoint Charlie |
3.
La tercera zona que indudablemente atrae la atención de todo el mundo es EL
MURO o los remanentes del
mismo. Es como si todos quisiéramos palpar que realmente
existió. A lo largo de todo Berlín observamos la marca en el pavimento que
indica por dónde pasaba pero en este
sitio, permanecen en pie unos 1300 metros de muro, convertidos en una galería a
cielo abierto (East Side Gallery) con 103 murales pintados.
1.
4.- El otro centro de
neurálgico de Berlín está presidido por la POSTDAMER
PLATZ y toda la zona que cubre la Av. Kurfursterdamm (Ku´dam). Esta zona era el centro de Berlín
Occidental. En la Av. Ku´dam se encuentran las tiendas más afamadas del mundo y
cuentan que, cuando la apertura del muro, las damas de la República Democrática
rompieron los cochinitos e invadieron estos predios: ¡Imagínense, más de 20 años si ir de “shopping”!. En la Ku´dam se encuentra la que, según se
dice, es la tienda más grande de Europa: KA DE WE; en Berlín los precios están
bastante mejores que en el resto de Europa, pero, amigas y amigos, esta tienda
es CARA. Sin embargo, vale la pena visitar su 6º. Piso, un paraíso de
delicateses e inclusive comer en el
autoservicio del 7º. Piso donde se come muy bien y a precios solidarios.
La Postdamer Platz es
una estructura muy hermosa y moderna.
Paseando por aquí, se puede visitar el museo de la Berlinale, la tienda
Saturno (de televisores, sonido y electrónicos en general, es un espectáculo de
tecnología, con equipos que ni soñamos por estos lados). Al oscurecer, regrese
a la Postdamer es muy recomendable verla iluminada, disfrutar del ambiente,
tomar una cerveza y comer algo.
Cúpula de Postdamer Platz, iluminada. |
La Tienda |
Postdamer Platz de día |
En Berlín se llevó a cabo un proyecto de Ositos pintados por afamados diseñadores, parecido al de las vacas en Madrid de hace algunos años. Les dejo para disfrutar el Oso creado por Romero Brito cerca del estadium de Berlin y el patrocinado por nuestro primer hotel el Art´otel, un hotel dedicado a Andy Warhol, que es más bien una ofensa al artista norteamericano; El hotel es feo, incómodo y de las 4 estrellas que dice tener, le sobran una y tres picos de otra (luego nos mudamos al Park Inn en Alexander Platz, como ya comenté).
LA CIUDAD DE POSTDAM.
Muy cerca de Berlín, se encuentra la
ciudad de Postdam, capital de Estado Federado de Brandemburgo. A Postdam se ingresa, desde Berlín, a través del Puente Glienicke, mejor conocido
como El Puente de los Espías. Durante la
Guerra fría URSS y USA utilizaban este puente sobre el Río Havel para
hacer intercambio de espías (el
intercambio más famoso es el de Francis Gary Powers, piloto norteamericano
derribado por Rudolf Abel miembro de la KGB apresado en USA). El puente aún hoy conserva sus barandas
pintadas de dos diferentes tonos de verde indicando los lados en conflicto.
Ya en Postdam, una de las joyas arquitectónicas a visitar es
el Palacio SansSouci, llamado el Versalles Alemán. En verdad hermoso, con inmensos jardines
poblados de espectaculares esculturas; fue un poco molesta aquí la actuación
del guía de Europamundo, quien se
concentró desagradablemente en puntualizar la homosexualidad de Federico II y su amistad con Voltaire; cabe
destacar que existen escritos de Voltaire burlándose también de este rasgo de
la personalidad de Federico II, a pesar de que, en alguna oportunidad si fueron
amigos y el escritor e intelectual frecuentó, al igual que el músico Bach, el
palacio de SansSouci.
El otro palacio a visitar es CECILIENHOF
que no se ajusta propiamente a nuestra imagen de palacio. Cecilienhof es más bien una inmensa y lujosa
casa de campo, pero al más puro estilo alemán.
Se celebró aquí la Conferencia de Postdam donde Truman, Churchill y
Stalin diseñaron la Alemania y la Europa de la postguerra.
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